Mikaela Kellner pasaba la tarde en el parque Ralambshov de Estocolmo junto a sus amigas, cuando un hombre se les acercó con la intención de venderles unas revistas. Al decirle que no, él sustrajo el móvil de una de ellas y echó a correr.
Fue entonces cuando Kellner, agente de policía fuera de servicio, echó a correr hacia él hasta alcanzarle.
Mikaela y otra amiga policía detuvieron al ladrón que “intentó escapar, por eso lo agarramos más fuerte”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario